(BH y RJ 18/06/14) Un supuesto desaire del argentino Lio Messi hacia el saludo de un pequeño niño que le extendió la mano momentos antes de la salida al primer partido del seleccionado albiceleste en su debut contra Bosnia en la Copa del Mundo 2014 sirvió para que el mundo que no lo quiere, o que busca alguna mancha en la “Pulga”, le sirva de pretexto para saltarle encima y ensuciarlo un poco.
El video completo (Ver aparte) muestra con certeza que Messi no llega a ver al niño que le pasa su mano para saludarlo porque uno de los jueces de línea al verlo a Lio al ingresar a la zona mixta enseguida levanta su brazo para darle la reverencia protocolar y de esa forma tapa al pequeño. Es tan imperceptible este movimiento que el siguiente jugador, Maxi Rodríguez, tampoco se da cuenta de la situación y comienza el saludo con la terna arbitral. Luego de esto, Messi, con la humildad que lo caracteriza, se acercó a la fila de los chicos e intercambió sonrisas con los elegidos a ingresar al campo de juego con los jugadores de ambos equipos. Así se utilizó esta escena recortada, sin el simpático diálogo con los chicos, para desprestigiar intencionalmente por algunas horas al 10 argentino.
Y como si esto fuera poco, ahora se pudo observar que algunos medios y redes sociales consignan que Messi encontró al niño y se sacó fotos con él. Pero para demostrar que aquella construida imagen no fue tan casual, la desinformación no dice que la foto presentada es en realidad de un encuentro anterior con el hijo del jugador brasileño Deivid, que con la ayuda del ex barcelonés Deco, logró cumplir el sueño de Cauan que era la de conocer al astro argentino, cita que tuvo lugar la semana pasada (Ver imágenes).
“Me enteré que están diciendo que no quise saludar a un nene: Es una locura. ¡Cómo no voy a saludar a un nene! Simplemente que no me di cuenta, pasé de largo, no sé en qué estaba pensando”, afirmó Messi luego de la conferencia de prensa (Ver aparte).
“Me sentí mal que se digan esas cosas porque yo tengo sobrinos e hijos y nunca haría una cosa así”, finalizó Lio para darle un cierre a una información que buscó esmerilarlo y dejarlo mal parado ante muchos dónde más le duele: la relación con los pequeños.
Tavofer 